sábado, 8 de septiembre de 2012

1989

No guardo fotos de aquellos años, tal vez las perdí, tal vez no desearía mostrarlas. Creanme de verdad.  Luego de pasar un 1988, con huelga incluida, llegue a 1989, los mismos amigos, los mismos compañeros. Una que otra nueva figura, que llegase de otro colegio. Pasamos de años, muy bien, eramos lo rescatable de muchos alumnos, algo faite. En 1º se quedaron compañeros que venían conmigo desde la primaria. Ya no estábamos juntos, como aquellos años. Recuerdo a la auxiliar Iris,  quién sufría por las travesuras de su salón, ya que ella llevaba nuestro salón, el 1º B, declarado por el grupo de profesores, como el más revoltoso. Las primeras palabras de nuestro tutor, para mi un gran profesor, el sr. Anibal Romero Quispe, quien nos daba Lenguaje...
-Chicos, como es posible, que cada día que pasa, me lleguen quejas de ustedes, me piden que los pongan en vereda, y yo no se que hacer ya- Rogaba el profe.

Así fue que en ese 88, el 50% del salón se quedo de año. Pase con mis amigos, al 2º B en ese 1989. Llegamos los del 1ºB, y a nosotros se nos unió el 25% del 1º E, salón que fue repartido entre los demás salones. Eso era la lógica, ir eliminando salones.Para ese año, se impuso lo que antaño se llamase Instrucción Pre Militar, y el encargado era el sr. Mogollón, un tipo de pocas pulgas, y a veces divertido. El auxiliar encargado era el pequeño "Cherry" y la tutora del salón, era la profesora que nos daba Formación Laboral, quien realmente no recuerdo el nombre. Y desearía acordarme, ya que ella fue una de las grandes maestras que he tenido. Por su caracter, y su gran forma de enseñar, y de escuchar. Religión era dictado, por un profesor de tez moreno, y tampoco me acuerdo el nombre. Educación Física, la daba un profesor, que le llamábamos "pepe" ya que por ese tiempo, Pepe era el DT, de la selección Peruana.. de ese profesor, tampoco recuerdo el nombre. La de matemáticas era otra de las excelentes maestras que haya tenido en mi época escolar. La profesora María Isabel Llagas. Muy entregada en su curso, y tenía una gran virtud, que enseñaba muy bien... a pesar que no ponía mucha atención, me volví muy despistado.

Me senté al fondo con esos muchachos faites, y aquellos que se nos unieron. No recuerdo el número exacto de alumnos, pero eramos casi 40. Martinez, Rupay, Astete, Huayhua, Nuñez, Espinoza, Osorio, De Paz, nos unimos a Janampa, Mata, Sergio, Ivan Saavedra, Gierson Sanchez y uno que otro más que no recuerdo su nombre. Las chicas también llegaron, pero ellas estaban en su mundo. Nos toco el salón de la esquina de la segunda planta. Aquel que daba al lado de la escalera.... Imaginense que pasaba ahí.

LA METIDA DE MANO

No recuerdo, el día, ni el mes. Por aquel tiempo, llevabamos clases los sábados, para recuperar en algo las clases que perdimos el año anterior por culpa de la huelga.  En los recreos, nos parabamos a fastifidar a la gente que pasaba por ahí. Se nos unía, algunos del A y del C. Siempre había quejas.. Pero una vez, eramos como 10, yo estaba como siempre, con mis amigos. Walter, Huayhua, Mata, y uno que otro del A, recuerdo a Mendez. El caso fue que por ahí pasaron chicas de 1º,  siempre pasaban, siempre las fastidiabamos. Pero esa tarde, fue diferente. Se les fue la mano, a los chicos. No me declaro un santo, pero, mi onda no iba por ahí, me encantaba andar con mis "causas" Los otros se quedaban dentro. Conversando de los que agradaba. Irma, estaba en 1º, había sido compañera mía, pero se quedo de año. Entonces ella, y sus amigas pasaban, siempre. No se les ocurrió otra cosa a los chicos, que meterles mano. Entre risa y risa, amenazas de ellas, creímos que todo paso. Al poco rato, llegaron ellas, con el auxiliar Cherry, quien era el encargado.  Las chicas, dieron su versión, en ella, caíamos todos. Ellas dijeron que yo estaba pero no sabía si tuve algo que ver. Entonces, los 10 muchachos, yo incluido, inventaban mil mentiras, excusas, para mostrar su inocencia. Pero no se llego a ningún lado. Cherry no tuvo idea mejor que encerrarnos, en el salón para comprobar las versiones de ambas partes. Aquí llego a una parte que siempre me desagrado. Edwin era un compañero que venía con nosotros desde primaria. Era muy recto, y disciplinado. Él nunca para afuera. Siempre metido en el salón. El auxiliar le pregunto,si podría decir si sabe algo. Él dijo que si escucho gritos, ya había mucha gente, que era costumbre nuestra estar en la escalera. Nos metieron otra vez al salón, y delante de nosotros, le pregunto:  ¿quienes estuvieron en ese momento? y Edwin señalo a todos con el dedo. Creímos que no lo haría, incluso yo pensé que no me señalaría, ya que siempre fuimos amigos. Pero señalo a los 10... Eramos culpables. Aquello, le costo ganarse la bronca de todos, y el declive de mi amistad con él. Le pedí que rectificase, pero no dio marcha atrás. Su palabra basto, para que nos hicieran un reporte. Nos sancionaron, y que para la próxima, era expulsión del colegio. Más que eso, lo que más me causo sorpresa,  fue la actitud de ese amigo. Cherry le dijo a Wilmer, quien era el brigadier del salón, apunta los nombres de ellos... Wilmer, me miro y me dijo: Que le hago Danny, ya están echas las cosas.. Unos le decían, no me apuntes, huevon borra, borra!!

LA BRONCA

Estaba de mal humor, ese día. Siempre nos jodiamos, pero ese día, actué mal. Mis compañeros, me jodian, les pedía paz, y no querían. Le pedí muchas veces. Hasta que no aguante, y discutí con uno. Otro salto, y dijo no te piques,.. Me pique, él me hizo cachita, y en ese instante, nos agarramos a golpe. Todos nos veían, nadie nos separaba. En el pasadizo de las segunda planta, nos dimos de alma. Pero fue un amigo mio, que decidió separarnos, incluso quiso sacar cara por mi, pero no podía, el otro también era su amigo. Al pasar los años, nos hicimos recontra amigos, y de esa bronca, nunca más volvimos a hablar. (Pero supuestamente me busco en la salida, yo no le hice el "chocala para la salida)  Me pelee muchas veces, pero ya no me acuerdo.

LA EXPULSIÓN DEL CURSO DE HISTORIA

Quien no recibió clases de la profesora Martha. Ella nos daba Historia del Perú. Tenía una voz muy aguda, y eso les causaba gracia a algunos. Yo ya estaba metido hasta las patas en el mundillo del faite... Me había maleado sanamente, por estar con mis amigos. 

La profe, pasa los números de orden, para revisión de cuadernos. 1, 2, 3,.....hasta que llego al catorce. Y uno la remedo con la voz aguda.. La profesora, se levanto, y grito:
- A ver quien fue el gracioso? Nadie respondía, a pesar que sabíamos quién fue. Me sentaba al fondo, con ellos, y entre nosotros estaba el que la remedo. La profesora sabía de donde vino aquello. 
-A ver, quien fue? ¡No repito más!
Nadie respondía. Solo eran risas, por algún lado. Esto enfureció más a la profe. Y determino:
-Los cuatro del fondo, se me van a fuera!
Entre esos cuatro estaba yo...  Las quejas no se hicieron esperar, más aún que entre esos cuatro, no estaba el chistoso y culpable de aquello.
-¡Afuera! Y nos fuimos
Afuera, llenos de rabia. Estábamos, Walter, Sergio, Huayhua y yo. Echábamos furor y rabia, más aún al saber que el chistoso, se reía, sin disimular. Entonces afuera, pensábamos que hacer. Miramos por la ventana, y vimos que se seguía riendo, así como todos. Sacamos un papel, y escribí: "O ........HA SIDO" y lo pusimos en la ventana.. Pero cuando la profesora vio aquello al salir del salón, escondimos el papel. Se dirigió a la dirección y trajo al auxiliar..
-Ya nos los quiero en mi curso, se me van, me han insultado- fueron las palabras de la profesora.
Nosotros sin saber el desenlace, rompimos el papel aquel en añicos. El auxiliar no los pidió, para verlo, pero ya no existía. La profesora, al entrar, volvió a decir; ¡Se me van! Es ahí que le dijimos, todo la verdad, ya acusamos al culpable.. La profesora lo echo. Pero ya no nos quería. El auxiliar, nos llevo a la dirección. Ya teníamos otro reporte. A la clase siguiente, nos miro, a los cinco..
-Ustedes ya no están en mi clase, se me van! 
Nos fuimos de ahí. Al acabar su clase, le pedí disculpas, pero no entraba en razón. Al día siguiente, tuve que llevar a mi madre, para que abogase por mi. Hablaron como una hora, mi vieja le dijo que a la próxima broma, me la veía con ella. La profesora entendió a mi vieja. A las dos semanas, volví a recibir clases de historia.


EL GESTO INESPERADO

Estábamos bromeando, con la gente. Entonces por ahí paso la profesora, Luz, quien nos daba Lenguaje. Nos hablo un rato, al irse, seguimos con las bromas, hacíamos gestos, entonces hice uno, pero la profesora volteo, y al verme pensó que era para ella. No dijo nada, pero se fue. Al recibir mi nota, tenía 05. Me causo sorpresa, le pregunte, y ella respondió: Tu sabrás no. Me llevo a la quinta nota. Ahí le dije que si hice algo mal, me disculpara. Me puso once, y aprobé raspando su curso.

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Ese año, lleve a quinta nota matemáticas, a pesar de tener una buena maestra como la profesora María Isabel. No aprobé y lo lleve a marzo. Ese 1989, también fue cuando fuimos a pedir y buscar ladrillos. Un proyecto del profesor Amadeo. También le quisieron dar un susto a Mogollon, pero él se los dio a ellos. Mi profesora de naturales, como el año anterior, fue otra de las buenas maestras que tuve. Gloría Pacheco. Ugarte no daba, Universal. Cívica el profesor Anibal.  Ese año, por suerte, no repetí de año. Me junte con amigos un poco faites, y me aleje de mis grandes amigos. Seguí un año más enamorado de esa chica pizpireta... En fin.