viernes, 16 de septiembre de 2011

Entre compañeros, cuadernos y carpetas


En el colegio que yo estudie... 

 ¿Como puedo describir una casa de estudios?, si hace mucho que no estudio. Pero hay miles de historias, en cada una de ellas. Para saciarnos de tanto recordar y charlar entre amigos y miles de aquellos que pasaron por aquellos lugares. Recuerdo que entro la profesora, ella toda sonriente, y empezó a mirarnos uno por uno. El llanto de algunos que no querían quedarse ahí. La calma de otros que sorprendía a todos. Mientras en casa, todos los padres hacían cálculos, y poder comprar los útiles que pedían a cada uno de sus hijos. En la mayoría de los casos, muchos hijos en cada familia. Mientras ellos pedían que no se maltratase, ya que tiene que pasar al hermano menor. Entre esos llamados block, que nos servirían para luego pasar en "Limpio" en casa. Los lapices para los menores y lapiceros para los mayores. Los libros muy famosos "Coquito" los cuadernos para ortografías. Más adelante las enciclopedias "Escuela Nueva" o alguna otra que nos sirva. Los libros de matemáticas. Los cuadernos de toda marca. pero los más conocidos eran los "loro", lapiceros novo o faber, o los lucas. Lapices de muchas marca, o los "patito" o "mongol". Los miles de útiles o como llevarlos en la mochilas, de las cuales eran competencias de cual era las más bonitas o mejor. Seis años en primaría y cinco en secundaría, en caso hayas pasado con buenas notas, o regulares. En otros casos, hasta más años. Lo que encierra una vida escolar. Ahí es donde conocemos a nuestros amigos, o a esas personas que te marquen de por vida. Anécdotas, miles de historias. Amistad en estado puro (si que existe, aunque no lo crean) Cuando cerrábamos el libro, ya pensabas en el día de mañana. Los listos, los más listos, los presumidos, los antipáticos, a o aquellos que algunos agarraban de punto. 

 Recuerdo una vez, en que me animaron a faltar (hacer novillos, tirarse la pera) y nos fuimos al centro de Lima, y preguntaba si hacía mal. Pero ese día las pasamos bien. Eramos 6. Pensaba, si los profesores se darían cuenta. Para más adelante, pensé no más. Tal vez, pero ahora no recuerdo. Las festividades en cada fecha especial, pasando por fiestas patrias hasta llegar a setiembre, mes de aniversario. Coincidía con el mes de la primavera, y ya se imaginan, vaya mes. Los torneos deportivos para ver quien era el mejor. 

 -En el colegio que yo estudie, esta en el barrio donde me crié, en ese pueblo que nos acogio y me hizo uno más de adopción, ya que nací en el norte del Perú. Me hizo un buen hombre (eso pienso). La educación, tal vez no haya sido buena, pero la intención era mucha, y siempre habían ganas 

 -En el colegio que yo estudie, conocí a esos amigos que hoy por hoy, siguen siendo eso, mis amigos. Siempre recordamos las ocurrencias, pero creo que son las travesuras, y todo aquello. Algunos de ellos, se sonrojan, hasta se avergüenzan, de aquello que hicieron. e hicimos. También a esas amigas, que casi no recuerdo el nombre. 

 -En el colegio que yo estudie, conocí a muchos profesores buenos, nobles y sencillos. No tengo queja alguna, sino a veces no entendí, culpa mía por no atender y estar a veces de despistado, como muchos. 

 -En el colegio que yo estudie conocí gente que venía de otros lugares, y nos contaban sus historias en los micros y combis, que los traían a este lugar al norte de Lima, ha recibir educación. 

 -En el colegio que yo estudie, conocía a esa niña pispireta e hilarante que me robo el sueño, por muchos años. Y debido a eso, preferí pensar en estudiar y no desviar mi futuro. A veces me arrepiento, pero así es el destino. 

 ¿Qué pensar de un colegio muy humilde? ¿Saldrán buenas personas? Ya nos los decían nuestros maestros. El alumnado es grande y siempre al empezar, entraban las ganas, de hacer bien las cosas, y no repetir los errores del curso anterior. Teniendo en cuenta, el perfil de cada alumno, pensaríamos como actuarían los maestros. El destinos nos fue dado, y podemos escoger nuestros objetivos, y la forma de la educación que queremos recibir. Pero a veces no podemos decidir. Poder nombrar, es difícil. Miles de nombres pasan por mi cabeza. Es en este caso, que me enaltece hablar (escribir) de aquella casa de estudios, el segundo hogar como les llaman. El colegio Nacional Infantas, llamado IE JAE 3024 desde 1997, en el mes de setiembre, recuerda su inicios. Esos días en que decidieron darle educación a esos niños, de aquel pueblo. A más de 6 décadas, Como cada uno de nosotros que paso por sus aulas, Recordamos esos días. Feliz Aniversario Colegio Nacional, Feliz Aniversario IE JAE de Infantas. Muchos exitos y más años de educación a toda la nueva generación.
____________________________________________________